Un ensayo sobre las propiedades del color y la naturaleza de la actividad artística. La instalación cromática de Ignasi Aballí te espera en la exposición de Colección. Vitrinas CMYK (2011) concentra buena parte de los intereses del artista. Aballí toma un elemento que habitualmente se utiliza para presentar una obra –unas vitrinas de metacrilato situadas a la altura de la mirada– y altera su función: si suelen funcionar como soporte, aquí son el contenido. Si normalmente muestran, en ese caso indican. En lugar de contener objetos (están vacías), Aballí les adjudica un color: los cuatro colores del sistema universal de impresión de cuatricromía conocido por su acrónimo CMYK (cian, magenta, amarillo y negro). El espectador está mirando el interior de unas vitrinas que no contienen nada material, sino un espacio de color. Las vitrinas llevan impresionados textos informativos sobre este sistema de impresión convirtiendo la instalación en una obra autorreferencial que invita a reflexionar sobre lo que se muestra y lo que se dice, la transparencia y la opacidad, la invisibilidad y la legibilidad. Y es que el conjunto de las propuestas artísticas de Aballí se construye como una reflexión en torno a la ilusión de la representación, ya sea pictórica o lingüística.

OBRAS EN LA COLECCIÓN DE IGNASI ABALLÍ

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