«En octubre de 2013 realicé una intervención artística en el edificio en el que vivo desde hace quince años. Encolé cuatro textos literarios en gran formato en las puertas de cuatro pisos del inmueble que el administrador de la finca –que desatiende sistemáticamente los problemas de los vecinos– había hecho tapiar con muros de ladrillo y cemento donde poco antes vivía gente. Titulé el proyecto Literatura de replà (Literatura de rellano).»

El relato de los hechos que desencadenó esta acción completa la obra de la artista, que jamás hubiera imaginado los efectos de su intervención. Desde los libreros que ocuparon uno de los pisos vacíos y que, de manera espontánea, guiaban a los visitantes que iban a ver Literatura de replà, hasta la ocupación de otro piso, la cena colectiva de todos los vecinos (los nuevos y los antiguos), el proceso judicial que siguió a la orden de desalojo y el hecho de que la defensa utilizó la intervención artística como una de sus pruebas.

Mireia Sallarès presenta un fragmento de uno de los muros con los que tapiaron las puertas de los pisos, la grabación de la cena, las declaraciones de la abogada y otros documentos del proceso que constituyen partes integrantes de su obra.