
Exposición
Del 11 de octubre de 2024 al 12 de enero de 2025
Petrit Halilaj & Álvaro Urbano. Ensamble lunar para mares en alza
Esta obra, inspirada en la canción popular española Ay mi pescadito (sobre pequeños peces que buscan maneras de sobrevivir e integrarse en su entorno) aborda conceptos como la conexión y el conflicto entre especies.
Ensamble lunar para mares en alza crea un ecosistema cambiante que incluye más de 40 esculturas a gran escala que representan criaturas acuáticas, terrestres y aéreas, híbridas y excéntricas, que no existen en el mundo real. Las obras, a las que se añaden esculturas nuevas para esta muestra, presentan especulaciones sobre futuros estados evolutivos de las especies que abarcan formas de supervivencia tanto submarina como celeste. Sobre las criaturas, una gran escultura en forma de huevo cuelga del techo y flota en el espacio, como símbolo de la naturaleza cíclica de nuestro mundo que invita al público a volver a imaginar nuevas formas de vida.
Las esculturas instaladas en el atrio del MACBA y repartidas en tres alturas, reflejarán la luz del sol con sus pieles metálicas en las paredes, techos y suelos del museo, modificando la percepción del espacio a lo largo del día. Cada escultura funciona a su vez como un instrumento musical que produce sonidos por medio de cajas de música y otras técnicas artesanales. Cuando se tocan juntos, las cajas de música y los demás instrumentos generan algo parecido a una «melodía» inspirada en la canción Ay mi pescadito combinada con sonidos submarinos. Estos sonidos, difíciles de armonizar, reflejan la complejidad de alcanzar la armonía entre especies en el mundo real.
Petrit Halilaj & Álvaro Urbano. Ensamble lunar para mares en alza, 2023.
Cocomisionada por TBA21–Academy y Audemars Piguet Contemporary.
Exposición y performance organizada en colaboración con el MACBA Museu d’Art Contemporani de Barcelona.
cocomisionada por
artista
Halilaj y Urbano llevan a cabo una creación constante de ficción colaborativa por medio de su labor a cuatro manos: la memoria colectiva se combina con las anécdotas personales, y una noción de parentesco que se extiende más allá de lo humano desencadena el pensamiento utópico: las plantas y los animales toman el testigo y se convierten en elementos de una escenografía de la intimidad. Los artistas han representado funciones en las que mapaches, zorros y gaviotas, así como criaturas híbridas imaginarias, son los personajes principales, rodeados de flores gigantescas y unos entornos que activan espacios de resiliencia y resistencia a través de una celebración de la otredad.
La intimidad y la identidad queer son factores clave de su obra: los artistas ejercen ambos como un medio de rehacer el mundo. Cada proyecto trae consigo una reconsideración del aspecto normativo de la sociedad y ofrece una serie de alternativas que generan espacios de negociación en los que es posible reconfigurar memoria colectiva y expectativas sociales. Su práctica colaborativa, que se desarrolla en paralelo a sus respectivos trabajos individuales, abre caminos inesperados por medio de la modulación, el diálogo y el desafío creativo. Una dinámica que se extiende también al modo en que ambos talleres crean un ecosistema en el que estas visiones debaten y cristalizan, implicando a menudo un gran número de participantes, incluidos investigadores, músicos y otros artistas.
Su obra se ha presentado en la 24.ª Bienal de Sídney (2024), el Nobel Peace Center de Oslo (2023), la Hamburger Bahnhof – Nationalgalerie der Gegenwart de Berlín (2023), el Ocean Space de Venecia (2023), la Opéra Comique de París (2021), el ARKEN Museum de Copenhague (2021); la Autostrada Biennale de Prizren (2021); la 17.ª Cuatrienal de Roma (2020), el Palacio de Cristal del Reina Sofia de Madrid (2020), el Brücke-Museum de Berlín (2019), los Mackey Apartments del MAK Center for Art and Architecture de Los Angeles (2017); el PAC-Pavilion of Contemporary Art de Milán (2015); el SALTS de Basilea (2015), el Bundeskunsthalle de Bonn (2015) y la Villa Romana de Florencia (2014), y próximamente podrá visitarse una exposición individual en el MACBA de Barcelona (2024). La obra de Urbano y Halilaj forma parte asimismo de la colección TBA21 Thyssen-Bornemisza Art Contemporary y de la Colección Jumex de Ciudad de México, y ambos han disfrutado de residencias conjuntas en el MAK de Los Angeles (2016-2017) y en la Villa Romana de Florencia (2014).