Escultura doble, 1968

El lenguaje plástico de Antoni Llena y de Àngel Jové abarca esculturas efímeras y objetos elaborados con materiales pobres. En la segunda mitad de los años sesenta, llevaron a cabo varios proyectos y exposiciones junto con Jordi Galí y Sílvia Gubern, presentados en espacios alternativos como la Petite Galerie de Lleida (1968), el Jardí del Maduixer de Barcelona (1968-1969) o la sede barcelonesa del Colegio de Arquitectos de Cataluña (1970). Pioneros en Cataluña del arte efímero y pobre, Llena y Jové produjeron obra conjunta como la construcción de cuerpos o pequeñas esculturas que experimentaban con formas de la geometría tratadas con materiales frágiles como el papel. Escultura doble, de 1968, forma parte de esos proyectos. Realizada con papel kraft manipulado con pintura y cera negra, otorga una nueva condición «blanda» a la solidez geométrica de un cuadrado. Esta obra es el resultado conceptual y formal de la combinación de los universos de sus dos autores: el arte pobre y efímero de Llena con la inmediatez y el gusto por el ensamblaje de Jové, en una poética compartida.