Pensar el conceptualismo global

Actividad

Pensar el conceptualismo global

en curso

Seminario

Las relaciones entre el arte y la política han sido una fuente inagotable para el estudio de los comportamientos artísticos a partir de 1960. El papel de los regímenes políticos totalitarios y las vías de transición a la democracia marcaron de forma ineludible el panorama de lo que llamamos arte conceptual, otorgándole un carácter social y político. Ahora los modelos paradigmáticos son otros y en función de éstos hay que diseñar una patrimonialización vívida y una diseminación cultural; para ser consecuentes necesitamos unas estrategias para la sintonización con sectores interesados.

Han pasado treinta años desde el momento en que apareció en el panorama mundial una forma nueva y singular de entender el hecho artístico que tuvo consecuencias en todo el mundo. Latinoamérica y algunos países del sur y el este de Europa entraron de lleno en la conjura, aportando formas específicas y diferenciadas por su carácter social y político que se conocen poco y que no se han estudiado suficientemente.

Todas las opciones que entendieron y entienden el arte no solo como una fuerza productiva, puramente artística, sino también como una fuerza social exigen ser consideradas y rescribir el arte conceptual. Las estrategias historiográficas, geopolíticas y económicas para la documentación de todos los conceptualismos se preguntan por la actualidad del debate conceptual.

¿Ha llegado la hora de decidir afrontar la cuestión, de hacer una inversión en la recuperación activa del patrimonio que le es propio y salir al paso de la mayoría de las lecturas del arte conceptual convencionales que se han hecho hasta ahora?

Antoni Mercader (UB)

En el marco del Proyecto Vivid [Radical] Memory del programa europeo Cultura 2000

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Seminario

Las relaciones entre el arte y la política han sido una fuente inagotable para el estudio de los comportamientos artísticos a partir de 1960. El papel de los regímenes políticos totalitarios y las vías de transición a la democracia marcaron de forma ineludible el panorama de lo que llamamos arte conceptual, otorgándole un carácter social y político. Ahora los modelos paradigmáticos son otros y en función de éstos hay que diseñar una patrimonialización vívida y una diseminación cultural; para ser consecuentes necesitamos unas estrategias para la sintonización con sectores interesados.

Han pasado treinta años desde el momento en que apareció en el panorama mundial una forma nueva y singular de entender el hecho artístico que tuvo consecuencias en todo el mundo. Latinoamérica y algunos países del sur y el este de Europa entraron de lleno en la conjura, aportando formas específicas y diferenciadas por su carácter social y político que se conocen poco y que no se han estudiado suficientemente.

Todas las opciones que entendieron y entienden el arte no solo como una fuerza productiva, puramente artística, sino también como una fuerza social exigen ser consideradas y rescribir el arte conceptual. Las estrategias historiográficas, geopolíticas y económicas para la documentación de todos los conceptualismos se preguntan por la actualidad del debate conceptual.

¿Ha llegado la hora de decidir afrontar la cuestión, de hacer una inversión en la recuperación activa del patrimonio que le es propio y salir al paso de la mayoría de las lecturas del arte conceptual convencionales que se han hecho hasta ahora?

Antoni Mercader (UB)

En el marco del Proyecto Vivid [Radical] Memory del programa europeo Cultura 2000

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fechas
16 abril 2007 – 11 mayo 2007
precio
Inscripción gratuita. Auditorio MACBA. Aforo limitado. Con servicio de interpretación simultánea
título
Pensar el conceptualismo global
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16 abril 2007 – 11 mayo 2007
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