En su práctica artística, el sonido y el trabajo con los procesos gráficos son una constante. En este sentido, la palabra es un material más, que utiliza la apropiación y la manipulación del texto como estrategia artística. El cambio de soporte, el formato e incluso la escala del mensaje se emplean para transformar nuestro modo de aproximarnos y percibir su significado. La reflexión sobre el uso de las nuevas tecnologías es uno de sus actuales intereses.

Irma Marco nos propone inventarnos un código secreto y usarlo en nuestra comunicación cotidiana. ¿Qué sucede cuando utilizamos un código secreto para comunicarnos? De repente, ¿la comunicación se corta o se abre una atención especial a cada signo, a cada palabra? En una comunicación que promueve la inmediatez, puede provocarnos otros tiempos de lectura que incluyen el desafío, la sorpresa e incluso la confusión. También nos puede evidenciar la complejidad del lenguaje escrito, donde todo lo que comunicamos no se entiende siempre como esperábamos. Pero no interviene únicamente el signo, sino también el medio en el que hacemos circular nuestros mensajes. ¿De qué manera nos condiciona lo que comunicamos?

Con este gesto, Irma busca alterar la forma para prestar atención a cada signo y cada palabra. De este modo, el misterio o la dificultad para leer algo puede convertirse en un reto que nos provoque una mirada crítica hacia el lenguaje y sus medios de difusión.

Propuesta 1

 

 

Propuesta 2
Propuesta 3

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